Mientras masticaba Liu a mi lado (al hacer una pausa) comenzó a preguntarme. -              ¿Qué me hiciste?- Dijo rascándose. -              Combine dos magias para...

Seguimos por el camino, esta vez escuchando las noticias, al parecer el frente de tormenta se acercaba y  sería muy violenta. ¿Sera acaso que la naturaleza preveía de lo que pasaría? Realmente lo dudaba, nunca antes la poción causo efectos previos, todos eran posteriores. Llegamos finalmente...

No se bien que escribir acá a esto me lo pidió el tío Juan. -              Ya estas grande, lleva un diario para cuando comiences a olvidar.- Dijo. No entiendo de qué habla, pero el es alguien muy inteligente así que le are caso....

Caminaba Pierrot con su amigo Raman, el ultimo niño perdido de la ciudad de Iyu. Esta mas que una ciudad, era un refugio de los muchas colas, como lo llamaban los niños de los lampiños.  No solo había zorros de nueve colas como Pierrot, sino que también los había de cinco, de tres, de dos y...

Seguimos en el auto charlando cuando me hizo notar que por la zona había llovido, y era verdad había charcos en el camino y por todas partes,  de verdad  fue una lluvia muy copiosa. No teníamos problema con los charcos por esto ya que nuestra caminata no tenía ruedas ya que era tipo...

Luego de que se retirara Urusangal gire el rostro hacia Liu y  con una sonrisa le invite a que se sentara, este acepto y pregunto. -              ¿Qué fue eso?- Lo hizo mirándome a los...

Aquel zorro que portaba muchas colas y ropas humildes,  caminó por la calle anunciándose, pero ni sus ropajes ni sus rabos atraía las miradas, sino que era  la mística de su presencia lo que lo hacía. Sentándose junto a la piedra de la plaza en la que solía hacerlo usualmente, tomó su...

Pierrot es conocido en Smidur como el espíritu de la venganza, la magia y el arte. Es adorado como espíritu protector tanto por cazadores, artistas y personas infames. Conocido también por su debilidad a la comida y a los baños. Su fama de genio que concede deseos es tan conocida como la de que...

Estire mis brazos para sacarme el sueño que se había posado sobre mi, estaba en la cama apenas pudiendo despertar. Mi descanso había sido excelente y mucho,  hoy y mañana eran mis días libres. Cinco minutos más entre las sabanas no me harían mal ya que tenía todo listo pero igual prendí la luz...

Siguieron pasando los días y las semanas simulando esta falsa vida que había creado pero con una novedad en el tedio de ser alguien del vulgo, me habían hecho empleado del mes. Por mala suerte (gracias a mi maldición) que cayó sobre aquellos que me hacían las cosas difíciles favoreció a mi...